23 de marzo de 2011

¿Cuál es tu granito de arena?


Reiteradamente escuchamos en diferentes medios de comunicación noticias e informes relacionados con la importancia que tiene el cuidado del medio ambiente en la salud de las personas, las consecuencias ecológicas que genera una mala administración de los recursos energéticos, la falta de una conciencia mundial acerca de que día a día estamos dejando pasar segundos de vida para las futuras generaciones, pero ¿Cuál es tu granito de arena en esta causa que nos involucra a todos?
Uno de los mayores problemas de todos es el cuidado del agua. Actualmente, el 23 % de la población carece de agua suficiente y para el 2025 esa cifra aumentará al 33 %, afectando a 50 países. En un futuro cercano la nueva guerra no va a ser por los combustibles fósiles, es muy probable que existan guerras por el agua, cómo ya está sucediendo en las provincias del sur de nuestro país, donde grandes holdings extranjeros compran tierras con grandes reservas de agua dulce.
Los animales dependemos del agua para sobrevivir, la hidratación es elemental para el funcionamiento de nuestro organismo. Pero somos los humanos, especialmente, los que debemos transformar algunas prácticas cotidianas para aportar nuestro granito de arena en esta causa, y dejar de malgastar este recurso no renovable.
Mientras que en varias provincias del norte de nuestro país hay comunidades, ciudades y poblaciones que tienen que sobrevivir con 1000 litros de agua semanales, en el mejor de los casos y cuándo se la llevan, en las metrópolis se emplea el agua potable para lavar autos, baldear las veredas, se lava la vajilla con la canilla abierta de forma continua, las personas se asean dejando correr el agua indiscriminadamente, entre otras irresponsabilidades, como si fuese un recurso que nunca se fuera a acabar.
Por esto, y por mucho más, cabe preguntarnos ¿Qué estamos dispuesto a hacer para cuidar este vital recurso para el hombre y los animales? Hoy es el momento para tomar conciencia de que si no lo cuidamos varias especies, inclusive la humana, están en peligro.
Empecemos por casa, cada acción es un granito que a simple vista parece nulo, pero observado desde la totalidad es un aporte muy importante. Comprometete y aportá lo tuyo, el planeta y tú vecino te lo van a agradecer.