De vez en cuando uno se pone a pensar en todo lo simbólico que lo rodea, de cómo las cosas suceden al tiempo que otras más relevantes son descartadas de los comentarios sociales; de cómo resurgen aspectos olvidados pero no menos interesantes, entre otras cosas.
Hoy vi la tapa del diario y un titular decía "riesgo país 847", en ese instante se me vinieron a la cabeza esas semanas de 2001 donde todo era caos, la noticia del día era si pasabamos o no los 1300 de riesgo país, si los bancos cerraban o no, todo era incertidumbre y desesperación, mientras que los pobres seguían siendo más pobres.
Ahora... qué no nos pasó a los argentinos: en dos semanas tuvimos 6 presidentes, dejamos de pagar la deuda externa a cambio de endeudarnos con los intereses, la sociedad se fue polarizando cada vez más, hasta que en el 2008 el INDEC manifiesta que la desocupación es de 9.8 %, como si uno no es un ser racional y no se da cuentas cómo dibujan esos números por una cuestión política.
El índice de pobreza creció hasta tal punto que el 53% de la población vive bajo la línea de pobreza ( pero el empleo creció... que dato relevante... habrá que creerle???). Cómo se explica que aumente el empleo y crezca la pobreza, es como que aumente el índice de consumo de alimentos y aumente el índice de desnutrición. ¿En qué medida influye la distribución de la riqueza en todo esto?¿Qué lectura se puede hacer?... habría que empezar por ahí en vez de hacer politicas sociales que fomentan la dependencia y el clientelismo político y no conducen a ningún lado.
De todas maneras los argentinos nos acostumbramos... ayer comprábamos pan a $1 peso el kg y hoy a $7 , ayer pagabamos $20 el boleto de colectivo a larga distancia y hoy nada más que $140, ayer nos preocupabamos por el riesgo país y hoy el país esta en riesgo ( no es que antes no lo estaba) y no nos damos cuenta o pensamos que estamos mejor que es peor.
Creo que todo esto se merece una reflexión pequeña de cada uno de nosotros que estamos entre esos privilegiados que podemos comer todos los días, podemos conectarnos a internet, podemos compartir una familia, podemos estudiar, podemos decidir y podemos vivir para que todo lo que suceda no nos pase por el costado y sepamos "leer" las cosas por detrás de lo que nos quieren mostrar.
No compremos cualquier noticia, seamos reflexivos, que no nos digan cómo estamos sino que cada uno pueda sacar sus propias conclusiones mediante un simple análisis de la realidad.
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